jueves, 2 de septiembre de 2010

PONENCIA: SITUACIÓN DE LA NIÑEZ Y LA ADOLESCENCIA EN EL AMBITO DEL MERCOSUR.


“PRIMERAS JORNADAS NACIONALES ABOLICIONISTAS SOBRE PROSTITUCIÓN Y TRATA DE MUJERES NIÑAS/OS”

FACULTAD DE FILOSOFÍA Y LETRAS - UBA – 4 Y 5 DE DICIEMBRE DE 2009

.
PONENTE.
Adriana de Lucio


Datos biográficos:

ESTUDIOS

Mar 1996 / Feb. 2003 Licenciatura en Ciencia Política, Facultad de Ciencias
Sociales, Universidad de Buenos Aires. Promedio: 8.04.
3 de julio 2006: Diploma de Honor, Facultad de Ciencias Sociales.

1966 / 1970 Bachillerato Nacional. Instituto San Patricio, Adrogué, Pcia. de Buenos
Aires. Promedio: 9.07.

EXPERIENCIA LABORAL

Sep 2005 a la fecha trabajo en el Consejo de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires en la Dirección de Procedimientos y Relaciones Interinstitucionales.
Marzo 2004/ dic 2006 docente Ad Honorem en la materia Ciencia Política en la cátedra Lagorio, en el Ciclo Básico Común (CBC) en la Universidad de Buenos Aires.
En el 2005, misma materia en la cátedra Ivancich.
2004 cátedra Saiegh. Integrando el mismo grupo docente.

Soy miembro de la Red Argentina de Ciencia Política de la Asociación Civil Mariano Moreno.
Analizamos el Presupuesto Participativo Porteño y las prácticas de Democracia Participativa en los ámbitos público y privado. Integramos el Foro Social Buenos Aires, miembro del Foro Social Mundial. Organizamos seis Jornadas de Ciencia Política los 23 de septiembre de 2002/ 2003/ 2004/ 2005/ 2006/ 2007/ 2008 con participantes del interior y exterior del país.

Integro la Red No a la Trata, desde marzo de 2005 como investigadora independiente. Trabajamos las problemáticas del tráfico y la trata de personas, en los ámbitos nacional e internacional.

Múltiples participaciones en congresos y seminarios, muchas de las cuales incluyen la temática de la trata de personas.

PONENCIA:

Situación de la niñez y la adolescencia en el ámbito del Mercosur. La problemática de la trata de personas de niñas, niños y adolescentes en la región.


Introducción

Decidí trabajar la problemática de las niñas, niños y adolescentes en el ámbito del Mercosur, centrándome especialmente en la trata de personas en este grupo etario.
La situación de la niñez en el mundo es de alta vulnerabilidad e incumplimiento de la normativa internacional de derechos. El escenario en la región es muy preocupante, todos los Estados presentan una profunda deuda social con la sociedad en general y con la niñez y adolescencia en particular. Existe un bajo acceso a la salud y la educación, en Argentina el nivel de deserción escolar es muy alto, se estima que 1 millón de adolescentes entre 15/24 años, no estudia, no trabaja ni es ama de casa. En todos los países se presentan serias dificultades para acceder al primer empleo formal, empujando a los mismos al mercado informal, ni hablar de la maternidad adolescente, en Argentina el 15% de los niños nacido vivos son hijos de madres menores de 9 años, el 85% de ellas son NBI, con necesidades básicas insatisfechas, ni hablar del tema de la desnutrición con las serias secuelas intelectuales y físicas que provoca.
La falta de respuesta a estos graves problemas, entre otros, indicaría la falta de compromiso real de los gobiernos con la niñez, expresada en una suerte de “gatopardismo”, por un lado existen grandes declamaciones a favor de los derechos de la niñez, legislaciones naciones adecuadas a la normativa internacional pero este ideario no tiene correlato en la realidad, faltan claras políticas públicas universales y programas eficientes, con los recursos humanos y materiales suficientes que ataquen las causas que provocan las situaciones de pobreza, indigencia, exclusión y vulnerabilidad, sólo se aplican parches focalizados para tapar estas situaciones.
La magnitud y relevancia que el fenómeno de la trata de personas adquirió en los últimos años en la región, obligó a los Estados a ingresar el tema en las agendas políticas nacionales y en la agenda comunitaria del Mercosur, intimándolos a implementar la normativa internacional suscrita y a cumplir con las propias leyes nacionales en la temática sancionadas en los últimos años.
Lo que se verifica es una intensa brecha entre el discurso y la realidad, entre la normativa y su efectiva implementación en la vida cotidiana en las sociedades nacionales.

Latinoamérica.

Según la CEPAL en el 2003, en Latinoamérica vivían 227 millones de pobres, el 44,4% de la población total y 102 millones de indigentes el 20% en la pobreza extrema, la mayoría eran mujeres y niños, esa realidad condujo a la acuñación de la frase “feminización e infantilización de la pobreza”. La pobreza es “el resultado de un proceso social y económico, con componentes culturales y políticos, las personas y los hogares se encuentran privados de oportunidades y bienes simbólicos y materiales por causas individuales y colectivas. (CEPAL, 2003d). La pobreza está asociada a otras formas de dominación, la etnicidad y la raza estructuran las relaciones sociales. Las mujeres pobres experimentan grandes obstáculos para su auto desarrollo, por menores oportunidades, por la discriminación sexual y el machismo.
En Brasil, en el 2001, el 61% de los pobres y el 71% de los indigentes es afrodescendiente, (Pereira de Melo, 2004), estas mujeres sufren una doble discriminación: por ser mujeres y negras (Abramo, 2003). Por ser mujer y pobre, la exclusión del mercado laboral resulta mayor, provocando una importante situación de vulnerabilidad. Los hogares con jefatura femenina aumentaron en casi todos los países, en Argentina un 44% entre 1995/ 2005 el porcentaje de hogares indigentes encabezados por mujeres es más alto en relación a los mantenidos por varones.
El Sida aparece en el subcontinente por transmisión heterosexual, asociada al comercio sexual, adquirió dimensiones que trascienden el ámbito sanitario para convertirse en una amenaza para el desarrollo regional. La feminización de las víctimas, conmina a los Estados a un refuerzo de las medidas jurídicas y sociales para proteger a las mujeres y los niños de todas las formas de violencia sexual, incluidos el abuso sexual infantil, el incesto y la trata de personas. (Thomas-Hope, 2002).

El Mercosur

El Mercosur desde su creación en Asunción en 1991, pasó por 3 estadios diferenciados, 1- en los ’80, de defensa y fortalecimiento de la democracia, 2- en los ’90, comercial y 3- en este siglo XXI está asociado a los derechos humanos con el acceso de gobiernos progresistas en algunos de los Estados Parte y Asociados. El tema está muy presente en los discursos y en las legislaciones nacionales pero no tanto en su efectiva aplicación en las políticas públicas. En estos últimos años, la mayor parte de los países que conforman el Mercosur experimentaron altos niveles de crecimiento económico que no produjeron desarrollo social. Los altos niveles de pobreza e indigencia, las situaciones de exclusión de grandes sectores sociales indican serias falencias gubernamentales para cumplir con las promesas electorales y la normativa adoptada. La deuda social es profunda, producto de una inequitativa distribución de la riqueza, y, en este estado de situación las niñas, niños y adolescentes son los más perjudicados.

Análisis de la coyuntura regional.

Entre los problemas más significativos encontramos, 1- Fragmentación de las temáticas de la niñez en las agendas en la región, 2- Débiles vínculos entre las ONG’s nacionales y regionales con los Gobiernos. 3- Muchos programas impuestos por las agencias y organismos internacionales, reproducen y agravan las dificultades en los temas que abordan. 4- La aprobación de la Convención de los Derechos del Niño por los Estados de la región modificó las agendas de los países en temas de niñez y adolescencia y provocó mejoras en la situación de la niñez en la región, facilitando 1- la institucionalización de la Convención, 2- la adecuación de las legislaciones nacionales y códigos, 3- habilita la exigibilidad de su cumplimiento, no obstante, recordamos que existe una importante brecha entre la normativa y su efectiva aplicación en políticas públicas, persiste una importante deuda social con la niñez en toda la región. Habitualmente en los foros y seminarios latinoamericanos dedicados a las temáticas de niñez se considera que los índices sociales retrocedieron, al menos entre el año 2006 / 2008, empeorando la situación de la infancia.
Una consecuencia de ello es la percepción que tienen las ONG’s regionales respecto de la pérdida de interés de los Estados sobre profundizar los temas de niñez en la región, así como la pérdida de influencia del Instituto Interamericano del Niño (IIN), la Oficina Regional de UNICEF, los miembros del CIDN de la ONU, ascendiente que habría pasado a organismos como el BID y la CEPAL, con visiones más economicistas de la sociedad.

Asignaturas pendientes en relación a la niñez y la adolescencia.

Llegó el momento de la efectiva aplicación de la Convención en el ámbito del Mercosur, a través de los Códigos de Niñez y Adolescencia, el cumplimiento de los Planes Nacionales de Acción, el incremento de la inversión y recursos en la infancia para la garantía de aplicación de Políticas y Programas que aseguren que todas las niñas, niños y adolescentes puedan gozar de sus derechos humanos y estimulen la investigación del impacto de las políticas económicas en la vida de los niños/as y adolescentes.
Un objetivo de corto plazo sería la elaboración de un proyecto, una plataforma común de acción regional sobre inversión en los derechos de la niñez y adolescencia consensuado entre el Gobierno, la Sociedad Civil y la Cooperación Internacional así como la confección de un proyecto de inversión en niñez y adolescencia en la región, una especie FOCEM de la niñez. Otra asignatura pendiente es la producción y recopilación teórica regional sobre los temas de niñez y adolescencia prioritarios de la agenda regional.

Diagnostico de Situación sobre los Planes Nacionales de Acción para la Infancia en América Latina y el Caribe. Julio 2003

Declaración Nosotros, los Jefes de Estado y de Gobierno y los representantes de los Estados participantes en el período extraordinario de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas sobre la infancia, reafirmando nuestra adhesión a los propósitos y principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas, estamos decididos a aprovechar esta oportunidad histórica para cambiar el mundo en favor de los niños y con su participación.” “Reconocemos que la Convención sobre los Derechos del Niño, el tratado de derechos humanos más ratificado de la historia, y sus Protocolos Facultativos contienen un conjunto amplio de normas jurídicas internacionales para la protección y el bienestar de los niños. Por la presente instamos a todos los miembros de la sociedad a que se unan a nosotros en un movimiento mundial que contribuya a la creación de un mundo apropiado para los niños.
Los gobiernos que participamos en el período extraordinario de sesiones, nos comprometemos a aplicar el Plan de Acción considerando la posibilidad de adoptar medidas como las siguientes: 1- Poner en práctica, leyes, políticas y planes de acción nacionales eficaces y asignar recursos para realizar y proteger los derechos de los niños y asegurar su bienestar, 2- Establecer o fortalecer órganos nacionales que defiendan los derechos de los niños, 3- Elaborar sistemas nacionales de peritaje para evaluar los efectos de las medidas que hayamos adoptado en relación con los niños, 4- Fomentar la conciencia y la comprensión generalizadas de los derechos del niño.
Cuentan con Planes Nacionales de Acción para la Infancia que ya fueron implementados, Chile, y Perú.
Los países que no cuentan con Planes Nacionales de Acción, se dividen en 3 categorías: 1- No presentan Plan y la situación nacional aún persiste muy débil, Argentina y Venezuela. 2- No presentan Plan, pero se elaboraron las primeras acciones sin definiciones políticas y recursos no asignados, o están en la primera etapa del diseño, Uruguay. 3- No presentan Plan, pero con acciones dirigidas a su diseño en proceso para la concreción de los Planes, Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Paraguay. (www.redlamyc.web.com.uy)

Respuestas intergubernamentales a las necesidades de la niñez y adolescencia.

Los gobiernos conscientes de su responsabilidad y con el ánimo de formalizar su compromiso con los derechos humanos deciden crear en diciembre de 2004 durante la Cumbre Presidencial de Ouro Preto, en Minas Gerais, Brasil, la Reunión de las Altas Autoridades de Derechos Humanos y Cancillerías del Mercosur y Estados Asociados (RAADDHH), contó con la participación de la Secretaría de Derechos Humanos de algunos países del MERCOSUR y sus Cancillerías.
En este trabajo sólo se tomarán en cuenta las actividades de la RAADDHH asociadas a la Iniciativa Niñ@Sur y la temática de la trata de personas en la figura de niñas, niños y adolescentes.

La trata de personas.

La trata de personas expresa la involución social de nuestro tiempo. Las víctimas de la trata fueron definidas como las y los nuevos esclavos del siglo XXI, es el brutal comercio de la carne humana.
La trata de personas es un grave problema social regional invisibilizado, implica coerción y abuso, la falta de tipificación y sanciones en la mayoría de los países favorece la impunidad de los delincuentes, la densificación de las redes, la corrupción de las autoridades, la ineficiencia de las fuerzas de seguridad y la inoperancia del sistema judicial.
Como suelen confundirse los términos, trata y tráfico de personas, los definiré.
Trata de personas es la captación, transporte y/o traslado, acogida o recepción de personas, desde o hacia el extranjero o dentro del territorio nacional, con fines de explotación. Es un delito contra los derechos humanos. Siempre el fin de la trata es la explotación que consiste en mantener a una persona bajo condiciones de esclavitud o prácticas análogas, obligada a realizar trabajos o servicios forzados, mantenida en condiciones de servidumbre, implica la obtención de beneficios materiales por cualquier forma de explotación laboral y sexual. Siempre entraña alguna forma de engaño, amenaza o coacción física, emocional o psicológica, aprovechamiento de una situación de vulnerabilidad, es la más flagrante violación a los derechos humanos, convierte a sujetos de derechos en objetos de consumo. Es un delito y así debe ser tipificado y sancionado. La normativa internacional categoriza como víctimas a las personas tratadas y exhorta al país receptor a protegerlas y asistirlas, aunque habitualmente son consideradas migrantes indocumentadas violadoras de las leyes, revictimizadas, detenidas, deportadas, criminalizadas. Debería despenalizarse a la víctima y criminalizar, enjuiciar a los tratantes y clientes que abusan, violan y deprivan a estas personas de sus derechos. (CELADE, 2003). Existe diferencia entre trata interna y externa, ésta se refiere al mercado internacional, las redes exhiben modalidades de comercio que no están tipificadas, y resultan difíciles de sancionar, aquella se desarrolla dentro de las fronteras de un país. En el ámbito del Mercosur, prevalece la trata interna, todos los países producen y proveen “víctimas”, algunas en tránsito, hasta su destino final. Las delimitaciones no son taxativas, Las rutas interestatales habituales son de Perú a Chile, de Bolivia y Paraguay a Argentina que es país productor, de tránsito entre países limítrofes y “exportador” a países extrarregionales, especialmente Europa y Japón, centro de articulación de las redes europeas y asiáticas, el reclutamiento estaba principalmente en Brasil, se agregaron otros países de la región y de destino – que consume esta “mano de obra” tanto interna como intrarregional. La trata es un problema complejo, existe desconocimiento en la población, temor a denunciar, estructuras policiales corrompidas, redes de tratantes móviles. (CELADE, 2003)
El tráfico de personas implica que el sujeto migrante “contrata” a un “pollero o coyote” para que lo ayude a cruzar clandestinamente una frontera, en su mayoría son indocumentados, es un delito contra el Estado, por la situación de vulnerabilidad y/ o indocumentación puede derivar en situaciones de trata.
En este orden social mercantil todo tiene precio y todos hemos devenido en mercancías listas para la compra –venta en el mercado. La cultura segmenta a la población entre privilegiados dominadores y seres “inferiores”. El 90% de las víctimas de la trata son utilizadas para la explotación sexual comercial, históricamente fueron mujeres, hoy la demanda masculina (el 90%) hetero y homosexual reclama también niñas/os y adolescentes. Las formas de esta explotación son variadas, prostitución y pornografía, turismo sexual, mendicidad. Las mujeres en edad reproductiva son vendidas para matrimonios forzosos, usadas para el tráfico de óvulos, muchas son violadas y luego sus bebés ingresan al mercado de tráfico de bebés, así como para el tráfico de órganos, los hombres, jóvenes y adultos son coaccionados al trabajo esclavo o forzoso. Las formas de la trata de personas son múltiples, todas tienen sus demandantes, la oferta para satisfacer esa solicitud es inagotable, la materia prima es producida por la pobreza, la mayor proxeneta, las personas pobres y vulnerables conforman las 2/ 3 partes de la población mundial. Algunas voces equiparan la trata con la "desaparición forzada de personas", el 90% de las mujeres y adolescentes en situación de prostitución son víctimas de la trata.
La trata es un proceso, las redes captan niños, adolescentes, mujeres, varones, los encargados del reclutamiento engañan sobre el motivo del viaje y las condiciones laborales. La captación es flexible, se adapta a todo tipo de situaciones. Adolescentes responden a “castings” que les ofrecen convertirlas en modelos, luego las involucran en la prostitución, bajo amenazas y por la fuerza. Ellas, muchas veces, se convierten en reclutadoras cuando invitan a amigas a participar de su "trabajo". La prostitución de niños y adolescentes es camuflada en locales de masajes, bares y casas de citas, con la complicidad de las autoridades, que los habilitan, a pesar que en Argentina desde el año 1936, por la Ley Palacios, los prostíbulos están prohibidos. Los avisos publicados en los medios de comunicación de masas son engañosos, las mujeres suelen terminar en burdeles en situaciones de esclavitud. (Chiarotti, 2003). Existen numerosas denuncias sobre jóvenes que “desaparecieron” luego de presentarse a estos anuncios, muchos aluden a los lugares en los que fueron captadas. Esta metodología aumentó en los últimos años en América Latina asociada a la pobreza, la falta de empleo y oportunidades. Este tipo de reclutamiento es un circuito de corrupción de menores de edad muy difundido y difícil de detectar. Los “books” conforman catálogos para operaciones de trata. Sería positiva la difusión de esta problemática a través de los medios de comunicación, pero resulta difícil lograr su apoyo porque la publicidad de la “industria del sexo” es una lucrativa fuente de ingresos para estas empresas. Los medios de comunicación son cómplices del delito de trata de personas, lo promueven a través de notas “amarillistas” y la publicación de anuncios clasificados los convierte en co-responsables del delito, como lo establece el Protocolo para Prevenir, Reprimir y Sancionar la Trata de Personas, especialmente Mujeres y Niños y el Protocolo de Palermo que complementa la Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional. (Escamilla Alcántara, 2009)
Además de la oferta laboral, funciona el secuestro, bandas de traficantes se apropian de mujeres, las reducen a servidumbre y las trasladan de un lugar a otro sin dejar rastro. Actúan con protección policial, judicial y política. Las mujeres son “desaparecidas” de su hábitat cotidiano, y trasladadas lejos de sus hogares, encerradas, aisladas, golpeadas y violadas, obligadas a consumir drogas para aumentar su rendimiento físico.
En el lugar de destino son recibidas por los dueños o encargados de los clubes quienes les retiran la documentación y el dinero para evitar fugas. Bajo amenazas de muerte, golpes y violaciones múltiples, las domestican y son controladas estrictamente por sus explotadores. La trata es un crimen de lesa humanidad atrapa en sus redes a millones de inocentes, condenándolos a la enfermedad y la muerte. Esta sociedad inequitativa levanta barreras a los niños y adolescentes en situación de calle, les impide el ingreso al mercado de trabajo formal, arrojándolos al informal, sufren todo tipo de violencias y abusos y se convierten en potenciales víctimas de trata.
Las organizaciones delictivas dedicadas a la trata convierten a las personas en “mercancías de exportación”, operan como empresas, con una extensa red de sucursales diseminadas por varios continentes. Sus bases de captación están en los países pobres, los de recepción, son los industrializados, esta red global permite operar en gran escala y obtener ganancias fabulosas, que según la ONU ascienden a más de 7 millardos de U$S al año. Los cabecillas son difíciles de capturar, están protegidos por inescrupulosos funcionarios policiales y judiciales y evaden la justicia. Existen bandas dedicadas al tráfico sexual y la trata para clientes pederastas “especiales”, operan bajo la fachada de instituciones religiosas y fundaciones dedicadas a la protección de infantes.
La prostitución creó un auténtico tráfico de esclavas. El tema de la trata de personas está invisibilizado por su estrecha correlación con la prostitución, el 90% de las víctimas son explotadas sexualmente y la naturalización de la prostitución impide ver la esclavitud que registra esa relación. Corresponde relacionar prostitución con su demanda. La sociedad culpabiliza a las víctimas cuando debería hacerlo con los explotadores y penalizar a los clientes cuya demanda genera el negocio, en especial cuando se explota a niños y adolescentes. La complicidad estatal en este perverso negocio se verifica en la falta de controles y de apoyo para prevenir y combatir este delito y atender a las víctimas, quienes, al ser rescatadas, al carecer de capacitación laboral y asistencia sostenida y sin cambios en su contexto vuelven a ser captadas por las redes y a caer en la prostitución. La prostitución es una forma de la violencia de género, la mayoría de las víctimas son mujeres y niñas, vulnera derechos y es incompatible con la legislación internacional que compromete a los Estados a suprimir todas las formas de trata y explotación de la prostitución de la mujer.. Estigmatización, acoso, impunidad, factores raciales, demanda de “exotismo” forman parte de la oferta y la demanda en el mercado del sexo. El machismo perpetúa la existencia del utilitarismo sexual de la mujer y la trata de personas como un fenómeno social difícil de cuantificar que afecta a millones de mujeres y niños. Este infame comercio genera poderosos imperios económicos debido a la explotación de millones de personas. La trata de personas tiene una dirección “sur - norte” asociada a la pobreza, la falta de oportunidades laborales y educacionales, la inseguridad, la violencia y los conflictos armados. La trata de mujeres y niños para explotación sexual tiene escala internacional aumentando la complejidad del fenómeno, se afirma que las mujeres dan más ganancia que la droga o las armas, éstas se venden una sola vez, a las mujeres se las revende ...”.
Prostituyentes. En general son hombres jóvenes, exitosos, con dinero. La prostitución es una violación autorizada socialmente por la mediación del dinero, supone el cumplimiento de imperativos patriarcales y capitalistas que proclaman el uso y abuso del cuerpo del otro – como mercancía de compra venta- a cambio de un pago. El mercado de la prostitución está fuertemente delineado por los prostituyentes. (Volnovich, 2006)
Otra forma de trata, es el matrimonio forzoso, las adolescentes son entregadas / vendidas por las familias, muchas veces convertidas en esclavas sexuales o para realizar trabajos forzosos, devienen en propiedad del hombre con poder absoluto sobre ellas.
Hoy Internet es usada para la venta de novias a través de catálogos de fotos, ofrecen a las víctimas, en su mayoría menores de 15 años, quienes son vendidas entre 5/ 8.000 U$S.
La venta de niños, niñas y adolescentes: supone cualquier transacción por la cual un niño/a o adolescente es transferido/a por una persona a otra a cambio de una retribución. Explotación sexual es la promoción, facilitación o utilización de personas en actividades sexuales a cambio de remuneración, pornografía infantil es la producción o publicación de imágenes pornográficas en las que se exhiben menores de 18 años, espectáculos en vivo, divulgación, importación, exportación, oferta, venta, distribución y/o posesión de imágenes pornográficas, grabaciones o fotografías. Los mayores obstáculos para erradicar el tráfico de niños se debe a que, muchas veces son los propios familiares quienes inician, entregan y/ o venden a los niños, por pobreza, ignorancia, tradiciones culturales. (Kozaczek 2006). Respecto de la explotación sexual comercial, en el norte de Argentina las redes crean “circuitos turísticos”, en los cuales se ofrecen niñas. Un velo cultural machista y paternalista invisibiliza esta problema, los niños son considerados objetos, los padres creen que son dueños de sus hijos. (www.nuevodiarioweb.com.ar/nota.asp?)
La trata de personas incluye el tráfico de bebés y niños. Las adopciones internacionales después de las guerras mundiales buscaron dar una familia a miles de niños huérfanos, hoy, algunos gobiernos impulsan la búsqueda de niños en el exterior para revertir el envejecimiento social y autorizan el funcionamiento de agencias. La adopción internacional “legal” encubre la "exportación" de niños. Argentina no adhirió a al artículo sobre adopción internacional de la Convención Internacional de los Derechos del Niño pero se entregan niños a parejas extranjeras. Médicos, agentes sanitarios, policías, jueces integran y/o ofrecen bebés a agencias clandestinas. Miles de niños son deprivados de su identidad e ingresados en el comercio sexual, forzados a trabajo esclavo o sus órganos son traficados. Centenares de agencias clandestinas buscan niños, quienes son vendidos a 60.000 U$S en los países desarrollados. La venta se simplificó, los bebés y niños son ofrecidos a través de catálogos publicitados por Internet. Este sucio negocio condujo en 1993 a la sanción de la Convención sobre protección de los niños y cooperación en adopción internacional. (Flores).
La trata de personas resulta funcional al sistema económico internacional en el cual estamos inmersos. Las empresas necesitan mano de obra esclava y/o trabajo infantil para reducir sus “costos laborales” e incrementar su competitividad. Estas prácticas son avaladas por lábiles legislaciones laborales, gobiernos corruptos y por debilidad estatal frente a los chantajes del poder financiero internacional. Si bien el 90% de las víctimas de trata son utilizadas en la explotación sexual comercial, sobre todo los varones son tratados para trabajos forzosos, esclavos, en tareas rurales, granjas, criaderos e industriales, en talleres textiles. En Argentina, personas bolivianas son traficadas y tratadas por redes que los esclavizan, la mayoría de los explotadores son connacionales, en el país de destino se reproducen las jerarquías sociales y económicas del país de origen. Sus salarios son muy bajos o no los perciben, sus jornadas superan las 8 horas diarias, viven en el lugar de trabajo, son encerrados bajo llave y no tienen libertad de desplazamiento. Los “patrones” utilizan a los hijos como rehenes para evitar huidas. Les quitan sus documentos y los convierten en migrantes indocumentados plausibles de ser encarcelados y / o expulsados del país. Muchos migrantes ilegales, personas traficadas, por su situación de vulnerabilidad, y a veces por desconocimiento del idioma devienen en víctimas de trata cuando padecen situaciones de explotación. Una vía habitual de trata interna, es la explotación doméstica, invisible para las autoridades, debido a una legislación discriminatoria respecto del resto de las y los trabajadores, la mayoría proviene de zonas rurales.
La industria del turismo sigue la dirección norte-sur, “agencias turísticas” ofrecen “paquetes” que incluyen servicios sexuales en lugares regenteados por las mafias dueñas de esos paraísos turísticos- sexuales. Algunos gobiernos facilitan el “turismo sexual” por los ingresos que genera, la prostitución es un buen negocio para algunos Estados. En 1985 la UNESCO definió a los Estados "promotores" como aquellos que estimulan el turismo sexual por los aportes a la renta nacional.



NOTA;
Esta ponencia continua desarrollándose, a lo largo de 61 paginas muy interesantes (al igual que esta primera parte) La segmentamos por cuestión de espacio. Se puede obtener completa solicitándola a "niunavictimamas@yahoo.com.ar"

No hay comentarios:

Publicar un comentario